martes, agosto 14, 2012

Sacando viruta al piso

El punto donde confluyen las pasiones no es nuevo. Hoy disfrutan del momento aquéllos que alcanzan el clímax mirando la tabla de posiciones, poco importa si se trata de una segunda fecha. Es tal la ansiedad por dejar de correr mirándole la espalda a los líderes que dos triunfos consecutivos en el inicio del torneo resultan una especie de panacea universal. La certeza de que en esta oportunidad no habrá que esperar el tan mentado período de adaptación, el entendimiento entre piezas nuevas y estables, la incorporación de conceptos técnicos desconocidos -nada de lo que en el pasado solía marcar un comienzo errático-, potencia los estados de éxtasis sostenidos al son de una marcha triunfalista.

En rigor, la actuación del equipo no rozó lo descollante ni mucho menos; simplemente se puso de manifiesto una expresión defensiva firme, del medio hacia atrás, y adelante se explotó la velocidad de un tiernito que tendrá la trabajosa tarea de escaparle al estigma de inferiores, si no evoluciona va a terminar como otros tantos que lo precedieron; cuestión que ya está sufriendo en carne propia quien asomó como un habilidoso volante creativo, en este comienzo con presente deslúcido. A pesar de los elogios desmedidos, para protagonistas que no dejan de arañar un puntaje de aprobado a secas, todavía está por verse cuánto más puede mejorar el trabajo de conjunto y crecer el rendimiento de las individualidades.

Sumar puntos en los primeros encuentros del certamen, cuando muchos recién están acomodándose, asegura un respaldo que puede salvar las papas cuando las competencias se superpongan y el desgaste empiece a pasar factura. Resulta importante tener presente que estos mismos protagonistas, que en la tarde sanjuanina tuvieron un despliegue físico significativo, dentro de poco deberán afrontar obligaciones en dos frentes. Habrá que ver si se decide priorizar alguna de las dos o si se apunta al todo o nada. Por lo pronto, si de la parcialidad dependiera, la colecta para solventar la fiesta bengalera no haría distinción de tinte. Las ambiciones colectivas, en cuanto quimera irrenunciable, no tienen límite.


APOSTILLAS

The only one. Al excelentísimo señor presidente le importan un bledo los pataleos de sus impares de comisión directiva. Hay que tener tupé para hacerle algún tipo de reclamo a quien desinteresadamente, y hasta ahora con el mayor de los éxitos, está dejando jirones de vida para hacer de la institución un paradigma a todo nivel. ¡Los ingratos que vayan a llorar a la iglesia!

Corto mano, corto fierro. Encabezados por el impresentable vice, un puñado de dirigentes anda sollozando por los rincones. Al parecer, muchos recién caen en la cuenta de que el estilo del primer mandatario contempla ignorar a todos los que se ubican por debajo de su inigualable figura. Si tienen alguna duda acerca de la impecable gestión ¿por qué no le preguntan por tuiter?

Murciélago hematófago. El goleador histórico ni tiempo tuvo de saborear la dulzura del retiro. Como buen admirador de la cultura fenicia, sabe que los resentimientos deben quedar a un lado cuando de negocios se trata, por eso ya está de vuelta en el ruedo. Aunque todavía no hay anuncio de presentación oficial, "manejará todas las categorías formativas". El lobo cuidará del rebaño.

Ni frío, ni caliente. Con la impresionante capacidad de análisis que lo caracteriza, el maestro expuso su opinión respecto de las desavenencias dirigenciales del momento. Amor y paz para todo el mundo y a otra cosa mariposa. Ahora que lo futbolístico marcha sobre ruedas no debería haber espacio para rencillas internas, mucho menos entre tan buena gente. Los hermanos sean unidos.