domingo, diciembre 02, 2007

Sombría despedida


Toda la afición esperaba que, en el último partido de local, el equipo le obsequiara una victoria. O, aunque más no fuera, un empate. Nunca una derrota. Mucho menos, una actuación tan decepcionante. Por eso los silbidos; porque, después de todo, los jugadores se quitan la camiseta, se duchan y a otra cosa mariposa, mientras que el simpatizante sufre el resultado toda la semana. Después del partido, escuchando los comentarios; al día siguiente, leyendo los diarios; el lunes, al momento del análisis; y así, día tras día, hasta la hora de la revancha. Por más "dolidos" que declaren estar los protagonistas, nada se compara con la frustración de las almas rojinegras que colmaron el Brigadier para regocijarse con un triunfo.

Igual sensación embargó al dt, quien a pesar de su parsimoniosa compostura no pudo disimular la bronca. Sus dirigidos no sólo jugaron mal, también mostraron una falta de actitud asombrosa, porque una cosa es tener una mala noche y otra diferente es desentenderse del compromiso que impone la camiseta. LA habló de "relajación", un concepto que no sirve para describir lo acontecido. El común denominador de este paupérrimo Colón ha sido justamente este tipo de desempeños, tanto a nivel individual como colectivo. La realidad del team sabalero es ésta. Un híbrido sin ideas y sin corazón. Lo contrario ha sido la excepción a la regla. Una vez más, habrá que esperar al año próximo para renovar las esperanzas.


Quedan tres importantes puntos en juego. ¿Sería utópico pensar que pueda darse otra excepción? Este año fue lastimoso para la entidad del barrio Centenario. En lo institucional y en lo deportivo, las malas nuevas fueron una constante; sin embargo, la gente apoyó a pesar de todo. Esa gente se merece una satisfacción. Y si este ciclo finaliza como tantos otros, quienes tengan la fortuna de seguir vistiendo los colores sangre y luto deberían replantearse no sólo aspiraciones, sino algo más elemental: la manera en que llevarán adelante la construcción de una historia diferente; porque los objetivos rimbombantes siempre están a la orden del día, lo difícil es transitar el camino que conduzca a ellos. Sencillo, pero real.



APOSTILLAS


Cotillón pa'todo el mundo. Una duda existencial: los fuegos artificiales que le pusieron color y calor al segundo tiempo ¿fueron un gesto desinteresado de la cd para con los muchachos de la popu? ¡Aguanten las relaciones carnales!


Algo se rompió. Durante el encuentro, un hecho no pasó desapercibido. Un intercambio de palabras entre el dt y Totono puso de manifiesto el fastidio de ambos. ¿El entredicho puede significar el adiós del colombiano?


Es tuya Juan. Comenzar el partido con un gol (en contra) y terminarlo con una tarjeta (la roja) fue la coronación de otra actuación memorable del peor marcador de punta derecho de la historia colonista. ¿¡Por qué no se va para siempre!?


Al ex gerente, con cariño. El goleador del campeón se acordó de su paso por Colón en medio de la euforia y los festejos. Cuando de semejante delantero, alguien dice que "no sabe correr", queda claro quién es el ignorante. Otro más que se va y explota.