jueves, septiembre 21, 2006

¿Y ahora, cómo sigue?


Y de pronto el “no hablo de cifras” se convirtió en una especie de «las querían, acá las tienen». Eso sí, nada de dar nombres, porque entre colonistas no se andan tirando palos; ya que en caso de repartir, no sólo le tocaría al innombrable sino también al actual tesorero –gran compinche de andanzas vignattistas– y a otros cuantos más, que estuvieron ayer y hoy siguen estando. Por lo tanto, se deberá aguardar a que la justicia sea menos indulgente que la dirigencia rojinegra y avance sobre los sospechosos, no sólo de dejar a Colón en la indigencia, sino de estafar al fisco.

Sólo queda un interrogante flotando en la atmósfera del Centenario: si para la dirigencia sabalera, la descomunal deuda la generó magoya… ¿la pagará montoto? Porque, aún considerando que los buenos oficios del batallón jurídico-contable, abocado a buscar atajos legales de todos los colores, logren una quita importante a la sideral suma adeudada ¿de dónde saldrán los recursos para afrontar los compromisos? Según información difundida por la cd, hasta el momento, la recaudación neta, deducidos los gastos por diferentes servicios, de los partidos jugados de local, no ha superado nunca los cuatro mil pesos. Los ingresos por masa societaria deberían estar destinados al mantenimiento de la institución y los correspondientes a televisación y publicidad a sueldos del primer equipo. Es de suponer que mucho remanente para pagar deudas no quedaría. Una cuestión a develar, sigue siendo la cuenta del exterior, que en el mejor de los casos podría significar un desahogo momentáneo.

A pesar de todo, GL es optimista y apunta a que florezcan los cracks del semillero en un tiempo no muy lejano. Empresa difícil si las hay. El club no se ha destacado, en los últimos años, como gran hacedor de figuras salidas de las inferiores. Si bien el proyecto de JCF es ambicioso y contempla echar mano en las divisiones menores, es lógico pensar que se estaría hablando de un mediano a largo plazo; siempre y cuando los resultados del primer equipo repunten y se prolongue la era Pelusa. Todo indica que la situación es muy complicada, aunque las autoridades continúen insistiendo con el latiguillo de que todo es controlable.

Por su parte, el monje negro, anda haciendo gala de su avezada capacidad para manejar situaciones intrincadas. Ya tiene preparadas las estrategias para enfrentar a la temible Afip y a la dura empresa Rolsey S.A. –principales acreedoras de la institución– a quienes, cuál entrenado sabueso, intentará despellejar retándolas a probar quién es más papista que el papa. Si lo logra, habrá que candidatearlo para algún puestito importante dentro de la política provincial porque probará un talento insuperable para salir de los huecos más profundos.

Mientras tanto, y para olvidarse de tanta problemática interna, los simpatizantes sabaleros esperan ansiosos el domingo, con la esperanza de traerse del gallinero aunque más no sea un puntito.


APOSTILLAS

Confeso vignattista, el agresor del agresor dijo: “Con Colón no se jode”. Ahora que se blanqueó la deuda y se apuntó elípticamente al culpable… ¿se le habrá caído el ídolo? ¿Pensará, también en este caso, hacer justicia por sus propias manos?

Dicen las malas lenguas que el agresor del línea formó parte de la troupe de colaboradores que recientemente fue agraciada con carnets “free” otorgados por la benemérita cd. Se comenta que en la este habría estado a cargo de grupo de tareas anti-insultos. ¡Oveja descarriada!

En el programejo Birra con fútbol, los conductores deberían incorporar babero a la vestimenta “cashual”. Cada vez que los invitados son GL y LH, corren ríos de complaciente baba. ¡Puajjj!

Traducción para quienes hayan pretendido entender algo de lo publicado por el vespertino local acerca de las cifras de la deuda. Los juicios no se redujeron a 39. Siguen siendo 78, 39 se presentaron a verificar los créditos y los 39 restantes siguen por sus cauces originales.