miércoles, febrero 20, 2008

Locos de atar


Algunas actividades son agotadoras, producen estrés, desórdenes emocionales y hasta trastornos cardíacos. Y él lo advirtió en incontadas oportunidades: "gobernar" Colón es una tarea harto complicada. Si a tamaña vocación de servicio se le agregan las "operaciones" que con tanta erudición emprendió durante el verano, es lógico que la mente y el físico acusen recibo. Entonces, nada mejor que un servicio cinco estrellas para quedar como nuevo y afrontar el último tramo de mandato, que puede deparar el cielo o el infierno.

Y no es el único. El titular de la pyme también anda enajenado. Por estas horas, ocupa la mayor parte de su tiempo en dilucidar el bendito dibujo que pondrá en cancha el viernes. Ya repasó todas las combinaciones numéricas posibles y aún no se decide. Cambia nombres, modifica posiciones, pero nada lo convence. Sus cavilaciones, conociendo a la perfección el material con el que cuenta, son un claro indicio de inseguridad. ¡Ojo¡ Desarticular el engranaje que pareció querer arrancar la fecha pasada podría ser demasiado peligroso.

Para variar, la onda insana no termina aquí. El colmo está apenas germinando. Como nada se pierde, todo se recicla, un inefable dúo anda con ganas de reincidir en cuestiones de pareja. La yunta pretende revolucionar el panorama político rojinegro con una fórmula explosiva. Pudo saberse que ya comenzaron a gastar suelas tentando a viejos camaradas de armas para sumarlos a su proyecto. Si el plan prospera, muchos van a hacer caravana hacia Puiggari, la afición, el oficialismo, la oposición y hasta cierto sector de la prensa. ¡Sálvese quien pueda!